Los datos de mayo sobre el IPP de Estados Unidos han superado las expectativas. Según el informe, aumentó un 0,8% mes a mes y un 6,6% interanual. Mientras tanto, el IPP básico cumplió con las expectativas y aumentó un 4,8% interanual.
El seguimiento de este indicador es muy importante porque los participantes del mercado lo utilizan como una medida de inflación. Además, se publica antes de la reunión de la Fed, durante la cual el comité analiza las acciones futuras sobre política monetaria.
Pero a pesar de los últimos datos, la Reserva Federal se mantiene firme en su creencia de que el reciente aumento de las presiones inflacionarias es temporal.
Y este miércoles, el presidente de la Fed, Jerome Powell, hablará para anunciar su decisión sobre política monetaria.
Su acción determinará si el oro superará los $1,900 esta semana o caerá por debajo de los $1,850.
En cualquier caso, el OCBC Bank dijo que proyecta que el oro caiga a $1,500 para fines de 2022.
El OCBC es la última institución en publicar una perspectiva negativa para el oro. Según ellos, los rendimientos reales de los bonos aumentarán a medida que disminuyan las preocupaciones sobre la inflación.
Proyectan que el rendimiento real de los bonos del Tesoro estadounidense llegará a cero, o incluso caerá a una tasa negativa en un futuro próximo. Luego, para fines de 2021, bajará hasta el -0,6%. Y dado que el oro generalmente se mueve en la dirección opuesta, es inevitable que su precio caiga por debajo de los $1,900.
Entonces, para fines de este año, el oro se valorará en alrededor de $1,800 y luego se volverá más estable en $1,500. Los precios se recuperarán solo en 2022.