Sanofi, el peso pesado farmacéutico francés, anunció el jueves que su beneficio neto del primer trimestre, que se asigna a los accionistas con arreglo a las NIIF, cayó un 43,2%, hasta 1.130 millones de euros, frente a los 2.000 millones del año anterior.
El beneficio por acción de la empresa también experimentó un descenso del 43,1%, pasando de 1,60 euros por acción el año pasado a 0,91 euros por acción este año.
Mientras tanto, el beneficio neto de las empresas se desplomó hasta los 2.220 millones de euros este año, frente a los 2.700 millones del ejercicio anterior. En comparación, el beneficio empresarial por acción cayó de 2,16 euros el año pasado a 1,78 euros este año.
Sin embargo, Sanofi consiguió aumentar sus ventas netas IFRS en un 2,4%, pasando de 10.220 millones de euros el año pasado a 10.460 millones. Este crecimiento, que ascendió al 6,7% a tipos de cambio constantes, se vio impulsado principalmente por el lanzamiento de nuevos productos.
En cuanto a las perspectivas fiscales para 2024, Sanofi se dispone a mantener la estabilidad del beneficio empresarial por acción, salvo por el aumento previsto del tipo impositivo efectivo al 21%. No obstante, prevé un ligero descenso de un solo dígito a tipos de cambio constantes (TCE) debido a este tipo impositivo más elevado.